No te eligió, es hora corazón, de dejarle ir,
deja ya de inventar excusas en su nombre,
entiende corazón, no te lo hagas más difícil,
tu tiempo hace tiempo se acabó.
No te eligió,
no lo hizo cuando lloraste su indiferencia,
no lo hizo cuando luchaste por su sonrisa,
ni cuando con tus alas rotas le hiciste volver a volar,
no lo hizo ninguna de las veces en que cerraste los ojos
para no aceptar la realidad
y en cambio abriste los brazos para consolarle.
No te eligió ¿por qué ignoras su esfuerzo
si te lo ha hecho saber? Sus mensajes han sido claros.
No te eligió,
no lo hizo cuando derrotaste tus propias objeciones
para estar a su lado,
no lo hizo cuando la promesa aún palpitaba;
tus limitaciones sólo eran otra excusa para alejarse,
simplemente no te quería ¿por qué es tan difícil entenderlo?
No se desvela pensándote por eso no hay buenas noches,
no seas terco corazón, no eres su primer pensamiento
por eso no hay buenos días, no te extraña, por eso no hay tiempo,
no es el trabajo, ni las ocupaciones, no es que no pueda, corazón,
es que no quiere, entiende y acepta
que ya es tiempo de soltar.
Tienes las manos rotas y sangrando de sujetar con todas tus fuerzas
la cuerda de un barco que ya zarpó a una orilla que no es la tuya,
y vas dando tumbos sobre las olas del desamor
destrozando tu propia fé.
No te eligió, corazón, la vida reclama que vivas,
insistir es un suicidio corazón, ya es tiempo suéltale y déjale ir.